
Ventajas e inconvenientes de cada temporada en el Gran Cañón
La temporada escogida para visitar el Gran Cañón no es indiferente ya que las condiciones climáticas y la mayor o menor afluencia de visitantes puede hacer variar la experiencia notablemente.
De forma general, las temporadas de vacaciones escolares y los puentes o festivos nacionales son las fechas de mayor afluencia de visitas y de ocupación de los alojamientos, por lo que habrá de tenerse en cuenta sobre todo a la hora de buscar alojamiento. Por contra, los meses invernales o las primeras semanas de primavera y últimas de otoño son ideales ya que se disfruta de buen clima y el número de visitantes es reducido.
En esta sección ofreceremos algunos consejos básicos para disfrutar del Gran Cañón en los diferentes meses del año y trataremos de ayudarte en tu elección de cuando venir.
El Gran Cañón en primavera
La primavera es un época de grandes fluctuaciones de temperatura y poca lluvia en general. El clima es variable y dificil de predecir por lo que en la maleta no debe faltar vestimenta adaptada a cualquier condición.
La afluencia de visitantes es media-baja, salvo en la Semana y Santa y semanas anteriores y posteriores y se pueden obtener buenas ofertas de alojamientos, aparcar y moverse por el parque con cierta comodidad.
Las últimas nieves mantienen cerrado el North Rim en esta época.
El Gran Cañón en verano
Todos los accesos están abiertos y los servicios turísticos trabajan a pleno rendimiento acogiendo a los muchos visitantes que eligen el cañón para sus vacaciones.
El verano es la temporada alta y los principales circuitos turísticos tienen mucho público. Por ello, hay que intentar hacer la visita entre semana y reservar los alojamientos con mucha antelación. Para evitar colas recomendamos madrugar e iniciar las rutas y resto de visitas temprano por la mañana.
El verano es tiempo de altas temperaturas y potentes rayos solares por lo que es esencial traer protección solar de sobra y sombreros. Puede haber tormentas ocasionales, de duración corta pero que pueden ser intensas. El peligro que tienen es el riesgo de riadas, sobre todo en el Cañón Havasu ¡cuidado con ello!. Ver consejos de seguridad en el Gran Cañón.
El calor es mayor en zonas bajas junto al río y disminuye un poco en las altas y sobre todo en el North Rim, donde puede llegar a hacer frío en pleno verano. La provisión de agua potable es muy limitada en el área del Cañón por lo que debes tenerlo muy en cuenta.
Si es posible, hay que evitar la visita el 4 de julio, fiesta nacional, con afluencia masiva de público y tiempos de espera mayores de los habituales, con aparcamientos llenos y zonas de espera de autobuses masificadas. Desde el Parque, recomiendan ese día utilizar el servicio «park and ride» desde Tusayan, es decir, dejar el coche en Tusayan y tomar el autobús de traslado al parque, con acceso sin colas.
El Gran Cañón en otoño
El otoño es para muchos la época ideal para visitar el Cañón del Colorado. Los niños están ya en el colegio y los padres de vuelta a su trabajo, por lo que la afluencia de visitantes baja mucho.
Las temperaturas son todavía suaves con posibilidad de pasar calor y frío en una misma estancia y en los meses de septiembre y octubre todavía están abiertas todas las instalaciones turísticas.
El Cañón en invierno
La temporada baja, de noviembre a febrero, es una época estupenda para visitar la zona, sobre todo si valoras el aspecto paisajístico porque otras actividades como el senderismo o el rafting se ven muy limitadas por las eventuales condiciones climáticas extremas que pueden llegar a bloquear las carreteras y caminos o hacerlos impracticables, sobre todo en zonas altas ya que las bajas sufren mucho menos el efecto del frío.
Los efectos de la nieve y el sol de invierno ofrecen estampas únicas y el número de visitantes baja considerablemente, haciendo que encontrar alojamiento a buen precio sea mucho más fácil.
Meter en la maleta ropa de abrigo y botas a prueba de agua y elegir el South Rim como lugar de visita ya que el lado norte (North Rim) permanece cerrado. Pese a las precauciones por el frío, es todo un placer realizar las rutas con nieve, con unas buenas botas y crampones. Por otro lado, podrás disfrutar de total intimidad de las puestas o salidas de sol, no olvides llevarte un buen termo de café. Esto vale también para el resto del año.
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Seria genial que pusieras cuando inicia y termina las temporadas que mencionas ya que en paises donde solo hay 1 o 2 temporadas en el año, no es clara tu valiosa ayuda.
Hablamos siempre de temporada local.
saludos